Para esta ilustración, me decidí por una forma acampanada del vestido y tonos turquesas en diferentes variaciones, así como verdosos en los ornamentos del traje.
La idea era buscar una alegoría primaveral en el conjunto, para ello envolví a la geisha de rosas y diferentes flores trabajadas con máscara blanca opaca para diluir los colores y también añadí un bonsai de fondo que se adapta al contorno de la figura y crea una especie de marco orgánico y natural, en vez de hacerlo en segundo plano. Creo que el efecto resulta bonito y quizás pruebe más adelante en otras ilustraciones a hacer lo mismo.
Técnicas: lápiz, tinta, acuarela y gouache metalizado sobre cartulina.
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